Las cápsulas de café representan un ejemplo de producto con un mal diseño que no permite su correcta gestión como residuo y que pueda acabar siendo reciclado. Su medida pequeña y el hecho que sigan llenas de contenido orgánico cuando se han convertido en residuos, dificulta su reciclaje, aunque la mayoría de ellas estén hechas de aluminio y sea un material totalmente reciclable. Además, se trata de un producto que no cubre ninguna necesidad real por la sociedad y que presenta muchas alternativas tradicionales y más sostenibles, como el uso de cafetera italiana y cafés molido a granel.
Evolución de la cantidad estimada de cápsulas de café vendidas en Cataluña y la generación de residuos asociada
Fuente:Elaboración propia a partir de datos de Alimarket y del Ministerio de Agricultura,Pesca y Alimentación
El año 2021 ha sido el primer año en que el consumo de cápsulas de café ha disminuido respecto al año anterior, desde la aparición de este producto hace unos 15 años.
Aun así, el consumo es elevado, estimado en unos 572 millones de unidades de cápsulas anuales en Cataluña.