El desperdicio alimentario año tras año genera la pérdida de miles de toneladas de alimentos, la generación de grandes cantidades de residuos orgánicos y de grandes pérdidas económicas, a causa de un sistema de producción, distribución y consumo de alimentos deficitario.
Evolución del desperdicio alimentario en diferentes sectores de producción de la UE
En el año 2022, los hogares generaron el 54,1% de los residuos de desperdicio alimentario (70 kg por cápita), muy por encima de la cantidad de residuos de desperdicio alimentario procedentes de los sectores de producción primaria y fabricación de productos alimentarios y bebidas (7,5% y 18,8%, respectivamente).
Poniendo en evidencia que estos sectores ya presentan estrategias para reducir estos tipos de residuos.
Los restaurantes y servicios de alimentación generaron el 11% del total de estos residuos y, finalmente, el comercio al por menor y otros tipos de distribución de alimentos fue el sector con menos residuos de desperdicio alimentario: un 8,3% respecto el total generado.
Se observa que los años posteriores de recuperación de la crisis de la covid-19, tanto en el sector de la restauración como en las actividades de los hogares, aumenta ligeramente el desperdicio alimentario.